No pongas todos los huevos en la misma canasta. ¿Te suena? Esta recomendación es clave e implica disminuir los riesgos de nuestras inversiones a través de diferentes activos, concepto conocido como "diversificación".
Dos instrumentos financieros que tienen una excelente diversificación son los fondos mutuos y los ETFs. En este artículo vamos a ver de forma general a qué se refiere cada uno y cuáles son sus diferencias.
¿Qué son los fondos mutuos?
Los fondos mutuos son un instrumento de inversión en base a un fondo constituido por el dinero de diferentes inversionistas para comprar activos financieros como acciones y bonos.
Algo así como una bolsa con plata de varias personas que es operada por una administradora, la cual decide dónde y cómo invertir.
Al invertir en un fondo mutuo compras una "cuota", la cual corresponde a un pedacito de esta "bolsa de inversión".
Gestión activa de los fondos mutuos
El rol de quien maneja activamente los fondos mutuos es decidir qué comprar, qué vender y cuándo hacerlo, con el objetivo de que la rentabilidad del fondo sea superior a la del mercado. Por esta razón, se considera que los fondos mutuos son una inversión activa.
Generalmente, los diferentes fondos mutuos te indicarán:
- El plazo recomendado de la inversión (horizonte de tiempo).
- El nivel de riesgo de la inversión (cantidad de renta fija y renta variable del fondo).
- Los costos de administración del fondo (comisiones y remuneraciones).
¿Cómo invertir en fondos mutuos?
En el caso de Chile, para invertir en fondos mutuos debes hacerlo a través de una administradora general de fondos (AGF). Las más conocidas y de mayor tamaño son Banchile, Santander, BCI y BancoEstado. ¡Pero no son las únicas!
El avance de la tecnología ha traído consigo algunas fintechs que funcionan como AGF y están reguladas por la CFM, permitiéndote invertir en fondos mutuos con muy poca plata y 100% digital, como SoyFocus y Fintual. Para esta última te dejo mi link de referidos aquí.
¿Qué son los ETFs?
Los ETFs o Exchange Traded Funds son instrumentos de inversión que, al igual que los fondos mutuos, agrupan una serie de activos financieros. Sin embargo, se diferencian por transarse en la bolsa de valores al igual que las acciones.
Generalmente un ETF sigue el comportamiento de un índice bursatil de referencia, ya sea de un país, de un sector o incluso mundial. Algunos de los ETFs más comunes que puedes encontrar son:
- ETF del mercado mundial
- ETF del mercado de bonos
- ETF de economías desarrolladas
- ETF de economías emergentes
- ETF del sector tecnología
- Sí, también hay ETF que siguen al IPSA (Chile)
¿Cómo funciona? Si el índice de referencia sube un 10%, el ETF que lo sigue subirá un 10% (y lo mismo si es que baja). Como te decía, un ETF sigue el comportamiento de su índice de referencia.
Gestión pasiva de los ETFs
A diferencia de los fondos mutuos, los ETFs no tienen un "manager" que se encargue de comprar y vender activamente, sino que tienen administradores que sólo se preocupan de seguir la composición del índice de referencia lo más precisamente posible.
El objetivo de los ETFs es igualar la rentabilidad del mercado, no ganarle. De esta forma se les considera una inversión pasiva.
¿Cómo invertir en ETFs?
Los ETFs se cotizan como las acciones en la bolsa de valores y se adquieren a través de corredores de bolsa. Esto implica que cada vez que compres o vendas un ETF debes pagar una comisión o "corretaje" al corredor.
Si bien los ETFs tienen gastos de mantención, estos son muchísimo más bajos que las comisiones de los fondos mutuos.
Por ejemplo, un ETF que sigue al S&P500 como el IVV de BlackRock sólo te cobra un 0,03% de comisión al año, mientras que hay fondos mutuos de acciones que te pueden cobrar incluso un 5% anual de comisión.
Diferencias entre fondos mutuos y ETFs
En resumen, ambos instrumentos son excelentes alternativas de inversión diversificada. Aquí sus principales diferencias:
Forma de gestión
- Los fondos mutuos son una inversión de gestión activa.
- Los ETFs son una inversión de gestión pasiva.
Objetivo
- Los fondos mutuos buscan obtener una mayor rentabilidad que la del mercado.
- Los ETF buscan tener la misma rentabilidad que el índice de referencia que siguen.
Costos
- Al ser administrados de forma activa, los fondos mutuos tienen un mayor costo de gestión que los ETFs.
- Al invertir en un ETF debes pagar una comisión de corretaje cuando lo compres y cuando lo vendas (no así en un fondo mutuo).
¿Has invertido en alguno de estos dos instrumentos? Conversemos en Instagram a través de @snacksfinancieros y cuéntame tu experiencia.